No tenemos constancia documental sobre la asistencia formal de Jamilena constituida en cofradía filial de la Matriz andujareña, cuanto menos en los siglos que van del XVI al XIX, pero eso no significa que como tal no hubiera en la población un culto a Ntra. Sra. promovido por una institución o grupo que a su vez pudiera, como ha pasado con otras cofradías, unirse a poblaciones vecinas a la hora de peregrinar al Cerro pues hay quien asevera de la posible existencia de una congregación u hermandad que representaba a dicho pueblo a mediados del siglo XVII, aunque como indicamos, no haya constancia documental de una presencia formal en la procesión del último Domingo de Abril ni en la relación de cofradías y hermandades de la Matriz de Andújar durante los siglos XVI al XVIII, e incluso autores antiguos de la talla de Salcedo Olid o Bartolomé Pérez de Guzmán en sus respectivas obras no indiquen la existencia de dicha cofradía en aquellas centurias.
A partir de ahí, el hecho de pertenecer Jamilena al partido judicial de Martos bien pudiera constatar éste hecho al que venimos refiriéndonos, e incluso “repartirse” los devotos de la localidad entre sus vecinas de Torredonjimeno y la citada anteriormente de Martos. El caso es que, a partir principalmente del siglo XX se tiene constancia documental de la asistencia oficial de una hermandad filial de dicha población al Cerro de la Cabeza, para honrar y venerar a la Reina de los cielos. Ya en 1960 año que fue Jubilar decretado por la Santa Sede con motivo de los fastos de la Re-coronación y proclamación de la Virgen como Patrona de la Diócesis de Jaén, ésta cofradía está registrada en el censo que la de Andújar tenía en estos años para otorgar antigüedad y por ende un orden en la procesión de Abril.
De hecho su puesto en la actualidad que es el 34 en la procesión del Cerro, siendo por ende la trigésimo tercera filial con lo cual denotamos que cuanto menos la asistencia de éste querido pueblo constituido en cofradía bien pudiera remontarse a fecha anterior a la guerra civil española, si tenemos en cuenta que quien la precede en el orden, que es la filial de Sevilla, comenzó a peregrinar, en su actual corporación gloriosa a partir de 1931, siendo ésta cofradía sevillana, una escisión de la primitiva de la de las “Siete Palabras” fundada en 1561 y que tampoco peregrinaba al Cerro de forma oficial en la Romería de Abril aunque de esta si te tiene constancia documental de su existencia.
Por tanto como vemos, aunque la datación de la fundación de la Cofradía de la Virgen de la Cabeza en Jamilena bien pudiera ser difusa por la escasa documentación, y principalmente por no haber sido esta corporación inscrita en los censos antiguos de la Cofradía de Andújar en el Cerro, no es óbice de poder afirmar que la devoción a la Virgen en éste pueblo está más que consolidada y acrisolada en el tiempo siendo esta, la mejor herencia que sus habitantes han podido dejar a las actuales generaciones.
Su sede canónica se encuentra actualmente en la Parroquia de la Natividad de Jamilena, donde se haya además la imagen de Ntra. Sra. de la Cabeza, sencilla y de bella factura. Su cofradía asiste regularmente al Santuario en Abril y en la festividad de la milagrosa Aparición en la noche del once al doce de Agosto de cada año, distinguiéndose sus cofrades por su devoción y cariño hacía la Virgen.
También son muchos los devotos de Jamilena que pugnan por poder portar las Andas de la Señora, y no son pocos los que lo consiguen siendo ésta una prueba más de todo lo anteriormente descrito aquí y que demuestra que ésta devoción está intrínseca en la forma de ser de las gentes de este pueblo.
Además la cofradía celebra sus cultos en el mes de Mayo con gran solemnidad y alegría procesionando a la imagen que allí se encuentra, portada por mujeres ataviadas con el traje de flamenca desde hace unos años. Además y a todo esto, durante el primer fin de semana de Mayo de 2013 la población vivió un momento especial junto a su cofradía produciéndose la bendición de un monolito con la imagen de la Virgen de la Cabeza en la localidad, obra del escultor Zamorano afincado en Andújar, Manuel López Pérez.
No quisiéramos olvidar que este pueblo fue cuna y lugar de procedencia de un gran devoto de Ntra. Sra. de la Cabeza, el cual fue maestro nacional educando a no pocas generaciones de “jamilenudos”, gentilicio con el que se le conoce a sus habitantes, hablamos de D. Juan Barranco, persona que colaboró con el Santuario durante toda su vida en todo lo que la comunidad de Padres Trinitarios necesitó ofrendando a la Virgen diversos objetos y donativos e incluso un bello manto el cual suele lucir la Señora con relativa asiduidad.
Pablo Mondéjar Expósito
Comisión de Historia
Asociación Peregrina y Mariana "Tras los pasos de Juan Alonso"
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